A simple vista, quizás pueda parecer que estas fotos tienen 25 años, pero lo cierto es que fueron tomadas ayer en las inmediaciones de Pozo Izquierdo, lo que empezó como una broma, terminó siendo una experiencia interesante y educativa.
Pons, entró al agua con una Sailboards de 4,8 sin sables, además, la botavara más larga que pudo conseguir, todavía era corta para poder tensar bien la vela, así y todo Pons entró al agua, sólo podía navegar al largo y con gran dificultad, y a la hora de hacer el waterstart fue todo un suplicio.
Pablo, llevaba una Depoorter de 4,5 y con un sable forzado en la parte superior de la vela, unos años más moderna que la Sailboards, me comentaba Pablo, que ceñir era imposible, que la vela tiraba a muerte de todos lados (soltar una mano en navegación era algo descabellado) y eso a su vez le provocaba numerosos spin outs en una tabla que nunca ha tenido ese problema.
Ese detalle del spin out, nos indica, que a veces ese problema que pensamos que concierne únicamente a la tabla o a la quilla, puede venir dado por una vela que cuando carga la racha nos tira mucho de la mano de atrás y termina por forzar nuestros apoyos hasta el punto de provocar un spin out, problema que no hubiésemos tenido con una vela más estable.
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